Como dice el refrán: «Los ojos no mienten». En lo que respecta a nuestros perros, sus típicos ojos de cachorro nos encantan. Por eso, suelen poner esa «mirada» cuando quieren pedirnos una golosina extra o nos han mordisqueado la ropa. Al no poder hablar, los perros utilizan los ojos para comunicarse con los humanos y demás perros.
Aunque determinadas miradas pueden transmitir enfado o desagrado temperamental, los ojos de cachorro son un signo de confianza y pueden ayudar a establecer una conexión emocional crucial y el apego de una mascota con su dueño. A continuación, descubrirás por qué a tu perro le encanta dedicarte esas miradas adorables y cómo mejorar el apego con él mediante el contacto visual.
¿Cómo surgieron los ojos de cachorro?
Los expertos creen que la capacidad —y la tendencia— de los perros a poner esa mirada de cachorro no es algo que haya existido siempre. Por el contrario, se habría desarrollado durante la domesticación, cuando los perros se dieron cuenta de que los humanos preferían las características infantilizadas. Adoptar comportamientos aniñados también les hace parecer menos agresivos y más atractivos ante sus posibles dueños.
Mediante la domesticación y la cría selectiva, los perros evolucionaron físicamente para poner la típica mirada de cachorro actual. Ahora poseen un músculo especial que les permite levantar las cejas para que los ojos parezcan más grandes. Un estudio descubrió que los perros son más propensos a utilizar los músculos de las cejas cuando su dueño los mira. Por otra parte, los investigadores observaron que los perros que movían este músculo facial eran adoptados más rápidamente (EN) en un refugio.
Por qué a las personas les encantan los ojos de cachorro
1. Los humanos prefieren ojos más grandes
Los estudios sugieren que las personas tenemos una preferencia innata por los ojos de mayor tamaño (EN); el aspecto más vulnerable de la mirada de cachorro nos despierta sentimientos de protección. En un estudio en el que se mostraron imágenes de perros con características físicas ligeramente alteradas, los participantes prefirieron perros de ojos más grandes y mirada más abierta.
2. Transmiten vulnerabilidad
Los ojos de cachorro equivalen a unos ojos grandes con una mirada tierna, que denota una gran dosis de vulnerabilidad. A pesar de estar asociada a los perros, esa mirada es algo que los humanos —sobre todo niños— han utilizado durante miles de años. Hay datos científicos que lo demuestran.
3. Son más emotivos
El contacto visual es una forma vital de comunicación entre un perro y su dueño. Las personas miran a los ojos de un perro para conocer sus emociones. Por su parte, los perros utilizan señales visuales para determinar si su dueño está receptivo. Aunque los perros se fijan en diversos rasgos faciales para «leer» nuestra disposición, las investigaciones revelan que los ojos son el elemento más importante para ayudarlos a procesar visualmente las emociones y los mensajes humanos.
4. Elevan el nivel de oxitocina
Mirar a un perro con ojos de cachorro tiene un impacto emocional y fisiológico en los humanos. De hecho, las investigaciones demuestran que, cuando un perro mira a su dueño, la concentración de oxitocina aumenta. Caroline Wilkinson, especialista en conducta animal de Barket Place, afirma que la oxitocina se asocia al apego afectivo y social.
5. Son fáciles de leer
Por último, los perros utilizan los ojos y el lenguaje corporal para mostrar sus sentimientos y enviar mensajes. Por ejemplo, mantener el contacto visual mientras arquean el cuerpo indica que quieren jugar. Sin embargo, evitar el contacto visual y encogerse puede significar estrés o miedo.
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Cómo utilizar el contacto visual para fortalecer el apego
Además de la oxitocina, la hormona del apego, la ciencia asocia el contacto visual, como los ojos de cachorro, con un mejor estado de ánimo y una mayor confianza. Así pues, ¿cómo puedes fomentar esos momentos de conexión visual? Aquí tienes algunos consejos de Wilkinson sobre el contacto visual:
- Háblale a tu perro de forma pausada y tranquila.
- Implícalo en juegos o en un adiestramiento de agilidad
- Dale una recompensa, como una golosina sabrosa
- Acaricia sus puntos favoritos, como alrededor de las orejas o cerca de la cola
- Evita el contacto visual intenso o las miradas fijas y profundas
¿No sabes si a tu perro le gusta el contacto visual? Puede que sea cosa de la raza. Unos investigadores húngaros descubrieron que la raza y la personalidad influyen en la probabilidad de que un perro establezca contacto visual (EN). Los perros jóvenes y juguetones son más propensos a sostener la mirada que los cachorros testarudos y con menos energía. Por tanto, si tu perro no se muestra muy dispuesto a mirarte a los ojos, no te lo tomes como algo personal.
Conclusiones
Los ojos de cachorro son uno de los muchos gestos adorables de nuestros cachorros que nos encantan. Aunque pueda parecer una mera táctica para conseguir más caricias o golosinas, los perros nos miran para demostrarnos su afecto y lo mucho que confían en nosotros. Recuérdalo la próxima vez que tu perro te ponga los ojos de cachorro más bonitos que hayas visto nunca.
También pueden ser señal de que el perro se lo está pasando bien. Una foto del cuidador de mascotas o del centro de alojamiento de mascotas en la que tu perro ponga esos ojos de cachorro es probablemente una señal de está pasando un buen rato. ¡Ten en cuenta que las apariencias engañan! No olvides conocer todos los signos de estrés canino, ya que para leer las emociones de un perro es necesario fijarse en todo el cuerpo, no solo en los ojos.