Cualquier dueño de mascota sabe que los perros son capaces de sentir una amplia variedad de emociones. Desde felicidad y emoción hasta tristeza y ansiedad, el lenguaje corporal de un perro suele decir exactamente cómo se sienten nuestros perros.
También te preguntarás si a tu perro le da vergüenza hacer caca delante de ti. ¿Por qué si no tardan tanto en hacer caca? Especialmente cuando miran hacia atrás como pidiéndote que apartes la mirada. ¡Privacidad, por favor! Pero, ¿pueden los perros sentir vergüenza? Es una emoción compleja, incluso para los humanos.
En pocas palabras, puedes saber si tu perro está avergonzado basándote en lo bien que lo conoces. “La vergüenza es una emoción humana, algo que sentimos cuando rompemos una costumbre o cometemos un error cultural”, dice Leigh Siegfried, CEO y fundador de Opportunity Barks Behavior & Training. De hecho, lo que percibimos como vergüenza canina suele ser una interpretación errónea del lenguaje corporal del perro (hablaremos de ello más adelante).
Definición de vergüenza
La vergüenza se basa en una comprensión colectiva de lo que está bien o es normal y lo que no. Esto significa que la vergüenza puede tener un significado distinto para cada uno de nosotros. Mientras que una persona puede sentirse increíblemente avergonzada por ir todo el día por la calle con un trozo de espinaca entre los dientes, otra persona puede simplemente reírse y seguir adelante.
Así que si hemos sido criados para avergonzarnos por el desorden o la caca, podríamos suponer que nuestros perros también deben sentirse avergonzados. Sin embargo, ese instinto también se conoce como antropomorfismo.
“El antropomorfismo se da cuando tomamos una emoción humana y la asignamos o proyectamos en nuestros perros”, explica Siegfried. Según las investigaciones, los dueños que antropomorfizan a sus perros tienen un vínculo más estrecho, pero el antropomorfismo también puede llevar a suposiciones. Podemos malinterpretar las emociones de nuestros perros al suponer que deben sentir o reaccionar igual que nosotros.
El espectro de las emociones caninas
Antes de determinar si los perros pueden sentir vergüenza, debemos establecer lo que sabemos y lo que no sabemos sobre las emociones de los perros.
“En comparación con los humanos, los perros tienen una escala emocional limitada”, dice Ali Smith, adiestradora profesional de perros y fundadora de Rebarkable. “Aunque son capaces de sentir emociones fundamentales, no necesariamente sienten las emociones complejas o compuestas de los humanos”.
Las investigaciones también han revelado que los dueños de las mascotas suelen atribuirles emociones básicas y complejas, aunque sus mascotas no sean necesariamente capaces de sentir esas emociones más complejas. Sin embargo, la mayoría de los investigadores coinciden en que los animales, incluidos los perros, pueden experimentar emociones fundamentales o básicas como:
- Enfado
- Alegría
- Tristeza
- Sorpresa
- Asco
- Miedo
Pero aún no está claro si los perros son capaces de sentir emociones más complejas. Entre las emociones complejas o secundarias se encuentran sentimientos como:
- Vergüenza
- Arrepentimiento
- Pena
- Celos
- Pudor
- Decepción
Tradicionalmente, pensábamos que solo los humanos eran capaces de sentir estas emociones más complejas. Pero las investigaciones demuestran ahora que nuestros perros también son capaces de sentir celos. Si es posible que nuestros perros sientan una emoción compleja, no es del todo improbable que puedan sentir otra, como la vergüenza.
Marc Bekoff, autor de “La vida emocional de los animales”, sugiere que las anécdotas ciertamente plantean la posibilidad de que nuestros perros puedan experimentar una variedad de emociones más amplia de lo que creíamos. Habrá que investigar más antes de poder afirmarlo con certeza.
Señales que se confunden con la vergüenza
Cuando pensamos que nuestro perro se siente avergonzado (y recuerda que puede que no sean sus verdaderas emociones), podemos observar lo siguiente:
- Esconde la cola
- Se esconde
- Echa las orejas hacia atrás
- Evitación
- Comportamiento dócil
- Se revuelca
- Comportamientos ansiosos
Algunos dueños también pueden verlas como señales de culpa. Pero, de nuevo, estas emociones tienen una moral y unas normas sociales asociadas, por lo que es poco probable (aunque no imposible) que nuestros perros las sientan.
En lugar de atribuir a nuestros perros emociones que no estamos seguros de que sientan realmente, es mejor prestar especial atención a su lenguaje corporal y a su comportamiento. Son un indicador más fiable de cómo se siente realmente tu perro en ese momento. “Una emoción que puede confundirse con la vergüenza o la culpa es el apaciguamiento. Es lo más probable cuando la gente dice que su perro se siente avergonzado”, dice Smith.
Para los humanos, la vergüenza tiene un propósito social. Recordamos la sensación de vergüenza cuando cometimos una metedura de pata y no nos gustaría volver a experimentarla. Pero este tipo de autoconciencia no se da en la sociedad canina.
¿Cuándo es probable que mi perro se sienta avergonzado?
Como dueño o dueña de una mascota, probablemente hayas visto esos vídeos virales de perros que parecen avergonzados. Perros sentados al lado de un cartel que dice “Me he comido la tarta de cumpleaños entera” o “He desenterrado las flores nuevas”. Puede que a nosotros nos haga gracia (a veces), pero también son situaciones que nosotros hemos determinado que son bochornosas para ellos.
De hecho, como hemos comprobado, probablemente no se sientan avergonzados ni siquiera cuando se les hace posar con un cartel. Si alguien se ríe de tu perro cuando hace una tontería, es más probable que esté confundido. De hecho, si te ríes de un perro que le hayan cortado el pelo de forma graciosa, se haya tirado un pedo o haya hecho caca, lo más probable es que haya sido una reacción de sobresalto para el perro.
Nuestros perros pueden captar nuestro lenguaje corporal, nuestro estado de ánimo y nuestro tono de voz. Pueden saber cómo nos sentimos, así que a menudo las señales de apaciguamiento o miedo que emiten cuando saben que no estamos contentos con ellos pueden malinterpretarse como vergüenza.
¿Tu perro reaccionaría igual si no estuvieras ahí cuando asaltara la papelera o destrozara un rollo entero de papel? Probablemente no. Si tienes una cámara para mascotas en casa, comprueba si el comportamiento de tu perro es igual o diferente cuando hace algo que tú no puedes presenciar.
Qué hacer si mi perro se avergüenza
“Si crees que tu perro está avergonzado, recuerda que es mucho más probable que esté mostrando signos de miedo o apaciguamiento”, dice Smith. Entre ellos se incluyen signos como bostezar, girar la cabeza hacia un lado o mostrar el blanco de los ojos más de lo habitual. Es fácil malinterpretar estas señales como vergüenza, pero también es más probable que sea una señal de ansiedad o preocupación. En algunos casos, el perro puede incluso ponerse a la defensiva.
“Partiendo de la base de que lo que tu perro está sintiendo realmente es apaciguamiento y/o miedo, es muy importante no castigarlo”, dice Smith. “Esto solo les demuestra que tenían razón al estar asustados. No tienen la capacidad de procesar que el comportamiento que llevaron a cabo es algo que no te gusta”.
Plantéate cómo puedes ayudar a tu perro a sentirse seguro, ya sea dándole un espacio seguro, como una jaula, o utilizando chuches y adiestramiento para detener las señales de miedo antes de que se manifiesten. Habla con un adiestrador de perros cualificado o con un especialista en comportamiento si buscas asesoramiento adaptado a tus circunstancias particulares.
¡A veces también tenemos que tener en cuenta nuestra propia respuesta!
“Nuestros perros responden a la intensidad o al cambio en nuestro lenguaje corporal, en relación con su sensibilidad, personalidad y temperamento”, dice Siegfried. Si tienes la costumbre de gritar al presenciar un destrozo o un comportamiento inadecuado, tu perro puede mostrar signos de apaciguamiento con la esperanza de suavizar tu reacción. Lo mejor que puedes hacer entonces es mantener la calma y alejar cualquier sentimiento negativo de tu perro.
“A menudo, cuando vemos signos de apaciguamiento, esto se debe a alguna interacción previa que ha dado lugar a este patrón de comportamiento. Todos hemos visto esos vídeos virales de gente que entra en su casa y ve que su perro ha destrozado algo. El perro se acerca a ellos con una sonrisa sumisa: es una gran respuesta de adulación”.
Observar el comportamiento es más importante que etiquetar la emoción
Por más que nos sintamos conectados y en sintonía emocional con nuestros perros, simplemente no pueden comunicarnos cómo se sienten. Sin embargo, podemos observar su lenguaje corporal y su comportamiento, e intentar evitar hacer suposiciones basadas en nuestras propias emociones.
Aunque todavía no sabemos con certeza si los perros y los gatos pueden sentir vergüenza, los investigadores creen que algunos animales, como los chimpancés, pueden sentir esta emoción. Pero es necesario investigar más antes de saberlo con certeza.
Por ahora, es mejor que los dueños de mascotas eviten la tentación de etiquetar las emociones de los perros. También debemos evitar ser la fuente de consecuencias negativas cuando nuestros perros no se portan bien. En su lugar, céntrate en lo que tu perro está (o estaba) intentando decirte. Tal vez el estropicio se debió a que te olvidaste de cerrar el cubo de la basura. O tal vez necesitaba un juguete para morder mientras estabas ocupado.
No siempre podemos saber con certeza lo que sienten nuestros perros, pero ¿quién sabe? ¡La investigación sobre la cognición y las emociones de los perros hace que los entendamos cada vez mejor! Aunque no necesitamos esperar a que la investigación avance para seguir mejorando la forma en que nos relacionamos y nos comunicamos con ellos.