Su estado de salud. Está claro que tienes que conocer sus costumbres a la hora de salir a pasear, lo que le gusta y no le gusta, si tiene o no permitido subir al mobiliario; pero lo más importante es saber cómo está de salud. Si tiene problemas dentales, gastrointestinales, de piel... Cualquier cosa que haya que vigilar y estar pendiente en todo momento. También conocer si tiene alguna alergia, de cualquier tipo. Y luego, claro está, ¡dónde es su sitio favorito para recibir mimitos!

Me gusta acostumbrarme al animal, por lo que las tareas irán un poco a lo que necesite. Si es más casero, no pasa nada, haremos plan de estar tranquilos en casa, con algún juguete o juego que le guste, lo más acogedor posible. Si le gusta salir a pasear, me encanta el senderismo, así que buscaremos rutas que podamos hacer para calentar bien esas patitas. Mi perro, en los paseos, solo quiere andar así que hay veces que vamos desde benalúa al final del postiguet y luego vuelta. Luego en casa solo quiere sofá, así que lo tapo bien con mantitas cuando hace frío o lo pongo en un sitio fresquito cuando hace calor y le rasco la cabecita hasta que ronca como un cerdito.