- No sustituye a consejo veterinario profesional.
El arroz, un pilar esencial en muchas de nuestras comidas, es el cereal perfecto que nos sacia a la vez que nos aporta una gran variedad de beneficios para la salud. Tanto si lo añades a un burrito gigante como si lo tomas simplemente como acompañamiento de tus proteínas, el arroz se utiliza en todo el mundo como un alimento básico muy necesario. Aunque el arroz es habitual en nuestra dieta, ¿es seguro para los miembros felinos de nuestra familia?
Dado que los gatos son carnívoros obligados, su sistema digestivo puede tener sentimientos diferentes respecto al arroz. Cuando los gatos comen comida de humanos, sobre todo hidratos de carbono, a veces se producen efectos secundarios no deseados. Muchos alimentos para humanos son beneficiosos para la dieta diaria del gato, mientras que otros no solo causan problemas en el momento, sino que pueden tener efectos duraderos.
Esto es lo que debes saber sobre si los gatos pueden comer arroz.
Beneficios del arroz para la salud
A veces el arroz blanco se lleva toda la mala fama. Sin embargo, los expertos han demostrado que tanto el arroz blanco como el integral tienen algunos beneficios asombrosos para la salud, dependiendo de los nutrientes que busques en tu dieta.
De hecho, el arroz blanco y el integral suelen ser exactamente el mismo arroz. Al arroz blanco se le quita la cáscara, el salvado y el germen, mientras que el arroz integral conserva intactos estos dos últimos elementos. Cuando el arroz está en su forma completa, se considera un “cereal integral”. Los cereales integrales están repletos de antioxidantes y fibra que conforman una dieta sana y equilibrada.
Cuando el arroz integral se transforma en arroz blanco, a menudo se considera “calorías vacías”, ya que carece de valor nutritivo. Sin embargo, en muchos países, el arroz blanco suele estar enriquecido con vitaminas y minerales como el hierro y el ácido fólico, a menudo en mayor cantidad que el arroz integral.
¿Pueden comer arroz los gatos?
En cuanto al arroz, la respuesta corta es: “un poco está bien, pero no en exceso”. El arroz no es tóxico para los gatos, pero tampoco es especialmente beneficioso. El arroz no está en la lista de alimentos tóxicos de la ASPCA, por lo que es seguro si comen un poco de vez en cuando, pero no debe ser un sustituto de la comida, ya que carece de los ingredientes necesarios para la salud felina. Los gatos son carnívoros obligados, por lo que, a diferencia de una dieta omnívora humana, los cuerpos de los gatos no están diseñados para digerir cereales con regularidad.
“Por regla general, los gatos son carnívoros obligados y no tienen necesidad metabólica/nutricional de consumir hidratos de carbono”, dice a Rover Gary Richter, doctor en medicina veterinaria, propietario y director médico del Hospital Veterinario Montclair de Oakland (California) y de Holistic Veterinary Care. “Pequeñas cantidades de cereales pueden estar bien en una dieta equilibrada, pero deben reducirse al mínimo”.
A los gatos les gustan ciertos tamaños y texturas de alimentos. Está bien darles arroz en pequeñas dosis, pero otros cereales integrales, como la avena, la cebada y el pan rallado integral, pueden ser mejores opciones. Estos trozos más pequeños son más fáciles de digerir para el gato y contienen más beneficios nutricionales, según PetMD.
¿Pueden comer arroz integral los gatos?
En pequeñas dosis y con poca frecuencia, está bien darles arroz integral como premio ocasional. Hervido y al natural, el arroz también se utiliza como recomendación de los veterinarios para combatir los problemas de diarrea. La fibra, presente en gran cantidad en el arroz integral, también se utiliza para ayudar a combatir el estreñimiento.
¿Pueden comer arroz blanco los gatos?
Al igual que el arroz integral, los gatos pueden comer arroz blanco en pequeñas dosis, siempre que esté bien cocinado. El arroz blanco carece de parte del valor nutritivo que tiene el arroz integral, pero como se recomienda dar arroz a los gatos solo en pequeñas dosis, no hay gran diferencia entre cómo afecta el arroz integral o el blanco al sistema digestivo del gato.
Sin embargo, en ambos casos, darle demasiados carbohidratos puede provocar obesidad o diabetes felinas. Elevar sus niveles de azúcar en sangre con hidratos de carbono de forma frecuente creará muchos problemas de salud a largo plazo.
Según la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Cornell, los síntomas de la diabetes felina incluyen:
- Sed excesiva
- Orinar constantemente
- Falta de apetito
- Incapacidad para saltar
- Vómitos
Ponte en contacto con tu veterinario en cuanto notes estos síntomas, ya que pueden ser los signos iniciales de la diabetes.
Si te preocupa la ingesta de hidratos de carbono de tu gato en general, fíjate en las etiquetas de los envases. Algunas chuches para gatos pueden tener cantidades excesivas de azúcar y carbohidratos.
Tentempiés saludables alternativos
Si quieres experimentar con alguna chuche alternativa al arroz, prueba con las verduras. “Los dueños de mascotas siempre pueden intentar dar verduras a los gatos en la comida o como premios. No todos se las comerán”, dice el Dr. Richter. “Sin duda, las verduras tienen buenos nutrientes cuando forman parte de una comida equilibrada”.
Estas verduras no son tóxicas para los gatos, según la ASPCA:
- Calabacín
- Apio (¡les encanta lo crujiente!)
- Zanahoria
- Pimiento morrón verde
- Espinacas ( ¡llenas de vitaminas A, C y K!)
- Guisantes ( a menudo se encuentran en muchos alimentos envasados para perros y gatos como complemento vitamínico)
- Calabaza (la calabaza se utiliza a menudo como forma de introducir fibra en la dieta de los gatos)
- Brócoli
Aunque las verduras pueden ser beneficiosas para la dieta de un gato, la fruta es otra historia. Debido a su alto contenido en hidratos de carbono y azúcar, las verduras son la mejor opción de las dos. Sin embargo, nunca sustituyas una parte importante de la comida de tu gato por verduras, ya que le faltarían nutrientes vitales.
“La gran mayoría de lo que comen los gatos debe ser una dieta equilibrada”, dice el Dr. Richter. “En general, las chuches no son equilibradas y no deben constituir una parte significativa de su ingesta diaria”.