¡Ahora sí que aprieta el calor! ¿Sabías que tu perro puede quemarse incluso teniendo un pelaje grueso? Hoy no hablaremos de quemaduras solares (por más de que algunos perretes necesiten protector solar), sino más bien de las quemaduras que pueden sufrir las patas de los perros. Seguro que te interesa descubrir cuáles son los síntomas de esta afección, además de aprender unos sencillos consejos para evitar el problema.
Quemaduras en las patas de los perros
Las patitas de tu perro son fuertes y resistentes, ya que su piel está hecha especialmente para absorber la presión y proteger las patas y los tendones. Sin embargo, no son zapatos, y son susceptibles a las heridas y lesiones. Si el suelo está muy caliente y tu perro lo pisa durante un largo periodo de tiempo, puede causarle daños.
Las patitas de tu perro pueden sufrir quemaduras graves después de un paseo al caminar sobre pavimento o asfalto caliente. Esto puede resultar extremadamente doloroso para tu mejor amigo de cuatro patas. Te recomendamos acudir al veterinario con urgencia si tu perro sufre quemaduras en sus patas.
De acuerdo con el veterinario Gary Richter, algunos perros no son tan susceptibles a esta afección como otros. El experto comenta que los peludos que pasan más tiempo fuera de casa “tienden a tener patas más gruesas y son más tolerantes al calor que otros perretes; además, algunos canes tienen pelo entre las patas como protección adicional”.
Sin embargo, el doctor Richter afirma que cualquier perro puede padecer quemaduras, especialmente con el aumento rápido de las temperaturas en esta época del año. “Nuestros amigos de cuatro patas quieren complacernos y a menudo harán cosas que pueden ser perjudiciales para ellos (como quemarse las patitas). Además, cuando los perros lo están pasando genial es posible que no se den cuenta de que se están quemando las patas. Las quemaduras aparecen rápidamente”, comenta el veterinario.
Nuestros perros tienen tantas ganas de estar con nosotros, que están dispuestos a olvidarse de las incomodidades o dolores. Lo bueno es que nosotros podemos ayudarlos.
Síntomas de las quemaduras en las patas de los perros
En el caso de que tu perro presente cualquiera de los síntomas que mencionamos a continuación, acude al veterinario rápidamente. Asegúrate de alejarlo de superficies que estén demasiado calientes lo antes posible si notas los siguientes síntomas en tu can:
- Tu perro se niega a caminar o empieza a cojear.
- Las patas de tu perro están descoloridas o más oscuras de lo habitual.
- Tu perro se lame o mordisquea las patas excesivamente.
- Ves ampollas en sus patitas o las notas excesivamente rojas.
- Ves que le faltan partes de la almohadilla de sus patas.
Si aún estás fuera de casa, mantén a tu perro en una zona fresca, donde haya césped para minimizar el dolor. Coge a tu perro si os encontráis en una superficie muy caliente y llévalo en brazos si es necesario.
Como medida adicional, puedes tratar las quemaduras de las patas de tu perro, enjuagándolas con agua fría durante 10 o 15 minutos. Intenta cubrirlas con calcetines para prevenir el lamido o los pequeños mordiscos. No pierdas de vista las condiciones de las patas de tu perro a lo largo del día, ya que pueden infectarse fácilmente.
Cómo evitar las quemaduras en las almohadillas de sus patas
Haz la prueba de los 10 segundos en el asfalto
Si tienes dudas sobre si hace demasiado calor para pasear con tu perro, comprueba la temperatura de la superficie del asfalto con tu mano. El doctor Richter dice que es difícil definir cuál es la temperatura que debes evitar a la hora de pasear con tu perro porque depende de la superficie en la que camina tu can. En lugar de mirar el termómetro, toca el suelo con tu propia mano. Si no puedes mantener cómodamente la palma de la mano sobre la superficie durante 10 segundos, las patas de tu perro corren el riesgo de quemarse.
“Si está demasiado caliente para la mano de un humano -dice el doctor Richter- entonces seguramente estará demasiado caliente para pasear con tu perro por allí“.
Además, puedes observar ciertos comportamientos en tu perro que te ayudarán a detectar si la superficie es demasiado caliente, por ejemplo si se desvía hacia el césped o tira de la correa hacia atrás para dejar de moverse.
Pasea a tu perro por la hierba
Evita las aceras, el asfalto y el cemento, ya que, como acabamos de explicar, pueden quemar las almohadillas de las patas de tu perro al instante. Por el contrario, la hierba dispersa mucho más el calor que estas superficies y su tacto es más fresco en las patas de tu perro, así que opta por coger una ruta sombreada o sal a pasear por el parque de tu barrio.
Elige la hora adecuada para pasear
En verano, saca a pasear a tu perro a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde, cuando el calor es más llevadero y la temperatura de las aceras, más soportable.
Ponle zapatos o botas para perros
Si te preocupa cómo proteger las patas de tu perro del calor sin alterar su rutina, puedes comprarle unas botas. Son una solución ideal si vives en un lugar que no tiene mucha sombra ni muchas superficies con hierba. Ten en cuenta que la mayoría de los perros tardan en acostumbrarse a las botas, así que ten paciencia y empieza poco a poco poniéndoselas solo durante breves intervalos de tiempo.
Usa loción protectora para las patas
Puedes añadir una capa extra de protección con una crema para las patas de los perros. Aplíquesela antes y después de los paseos para aliviar las patas secas. Además, también hace maravillas en el hocico.
¡Os deseamos un paseo fresco y agradable!