- No sustituye a consejo veterinario profesional.
Cuando los perros muestran un comportamiento anormal, a menudo suele ser porque intentan decirnos que algo va mal. Ya sea la pérdida de apetito o los accidentes en casa, cualquier cambio inusual suele ser motivo de visita al veterinario.
La conducta de ejercer presión con la cabeza, en la que un perro busca de forma compulsiva una superficie para presionar su cabeza contra ella, es un comportamiento que requiere atención veterinaria inmediata. Puede ser un signo de un problema neurológico que debe ser evaluado por un veterinario.
“A diferencia de cuando tu perro intenta acurrucarse contigo cariñosamente dándote pequeños cabezazos, ejercer presión con la cabeza contra algo se caracteriza por ser una cualidad mucho más compulsiva”, afirma la Dra. Rebecca Greenstein, asesora médica veterinaria de Rover y veterinaria jefe del Hospital Veterinario de Kleinburg. “El perro buscará una pared, o una superficie, o incluso la esquina de una habitación para presionar la cabeza de manera persistente contra ella”.
Con la ayuda de la Dra. Greenstein, repasaremos las señales de este comportamiento en los perros, las causas subyacentes más comunes y por qué es crucial acudir al veterinario lo antes posible.
¿Qué significa el acto de presionar la cabeza en los perros?
Empecemos por dejar claro lo que no significa: no es que tu perro te de pequeños cabezazos intentando llamar tu atención o empujando un juguete o la cama, intentando jugar o conseguir un objetivo. Según la Dra. Greenstein, este comportamiento se produce cuando tu perro presiona con la cabeza una superficie “aunque no haya un motivo racional”.
A diferencia de los cabezazos ocasionales, el acto de presionar la cabeza contra algo es compulsivo. Es un comportamiento frecuente y marcado. La Dra. Greenstein dice que una forma de reconocerlo es si intentas redirigir a tu perro para que deje esa conducta y vuelve directamente a ella.
¿Cuáles son los síntomas de presionar la cabeza?
A continuación, echaremos un vistazo a algunos síntomas asociados al gesto de presionar la cabeza que pueden indicar un problema médico neurológico subyacente.
- Presionar la cabeza contra una pared o superficie: como se ha descrito anteriormente, si tu perro presiona la cabeza compulsivamente contra una superficie sin un motivo claro, puede haber un problema neurológico subyacente.
- Reducción de los reflejos: la reducción de los movimientos corporales o la debilidad pueden ser indicio de un problema del sistema nervioso.
- Letargo: la somnolencia o el comportamiento letárgico es un síntoma muy frecuente de enfermedad subyacente que también puede ir acompañado del acto de presionar la cabeza.
- Ritmo excesivo: andar de un lado a otro o en círculos, especialmente de forma compulsiva, puede ser un indicador de que existe un problema cerebral.
- Llagas: pueden aparecer debido al roce constante de la piel contra una superficie. La Dra. Greenstein señala que suelen encontrarse en el hocico, pero también pueden aparecer en otras partes del cuerpo.
- Convulsiones frecuentes: las convulsiones, o la falta de control sobre los movimientos corporales, son otro indicio grave de que un perro padece un problema neurológico.
- Cambios en el comportamiento: los cambios repentinos en el comportamiento, como la agresividad espontánea, pueden ser señal de un problema médico en el cerebro.
- Problemas de visión: si tu perro se choca con las cosas o muestra otros signos de deficiencia visual, podría estar relacionado con un problema cerebral subyacente.
¿Qué causa el acto de presionar la cabeza en los perros?
Hay muchos tipos de problemas neurológicos que pueden causar este comportamiento. A continuación veremos cuáles son las causas más comunes:
Moquillo
El virus del moquillo canino se parece mucho al del sarampión en humanos, y con el tiempo pasa de fiebre y vómitos a ataques y convulsiones. Debido a la gravedad del efecto del virus sobre el sistema neurológico, el acto de presionar la cabeza puede ser una señal, y por eso la Dra. Greenstein dice que la vacuna del moquillo es fundamental para los cachorros.
Enfermedad neurológica
Existen numerosas enfermedades neurológicas, pero la Dra. Greenstein afirma que “cualquier cosa que pueda afectar al cerebro en lugares concretos, en el cerebro anterior y el tálamo, puede provocar, entre otros comportamientos, el acto de presionar la cabeza”. Un ejemplo es la neoplasia: tumores que se forman en el sistema nervioso, incluido el cerebro. Sin embargo, las infecciones y la inflamación también pueden formar parte de una enfermedad neurológica.
Encefalopatía hepática
La encefalopatía hepática puede desarrollarse en perros con trastornos hepáticos. La Dra. Greenstein explica que las señales neurológicas, como el acto de presionar la cabeza, pueden presentarse cuando se produce una disfunción del hígado, porque este desempeña un papel clave en la desintoxicación. Explica que los perros con derivaciones hepáticas pueden ser más susceptibles. Algunas razas pueden ser propensas a las derivaciones, como el Yorkshire Terrier, el Maltés, el Labrador Retriever y el Golden Retriever.
Deficiencia de sodio o hiponatremia
Aunque no es muy frecuente, según la Dra. Greenstein, las deficiencias de sal pueden causar síntomas neurológicos. Y lo mismo pasa al revés. La Dra. Greenstein dice que el exceso de sal, como cuando un perro come plastilina casera o bebe agua de una piscina de agua salada, puede causar síntomas neurológicos, como el acto de presionar la cabeza y temblores.
Tumor cerebral
Un tumor cancerígeno, o incluso un tumor benigno como un meningioma, puede presentar problemas neurológicos. El cáncer cerebral es, por supuesto, extremadamente grave. Pero, a pesar de su incapacidad para volverse cancerígeno, el meningioma ocupa espacio en el cráneo y puede causar síntomas como caminar en círculos, ceguera y el acto de presionar la cabeza.
Envenenamiento
Por desgracia, a veces se producen envenenamientos, ya sea por la ingestión de determinadas plantas de interior, artículos domésticos e incluso intoxicación por plomo. Si sospechas que tu perro ha comido algo tóxico, acude de inmediato al veterinario.
Aunque los problemas gastrointestinales son lo que suelen anticipar los dueños cuando se ingiere algo venenoso, también puede producir síntomas neurológicos, como espasmos, convulsiones y otros síntomas, como el acto de presionar la cabeza.
Infección
Como se menciona en los trastornos neurológicos, las infecciones también pueden afectar al cerebro y producir algunos síntomas, como el acto de presionar la cabeza. Un ejemplo muy conocido es la rabia. Una exposición a la rabia es extremadamente grave y mortal si no se trata; es una urgencia que requiere atención veterinaria inmediata. La infección penetra en el sistema nervioso ascendiendo hasta el cerebro y, además de síntomas como presionar la cabeza, puede causar alucinaciones, cambios en el comportamiento y parálisis.
¿Cómo diagnostican los veterinarios el acto de presionar la cabeza?
“Tu veterinario querrá llevar a cabo un examen físico y neurológico“, dice la Dra. Greenstein en lo que se refiere al diagnóstico de este comportamiento. Además de comprobar la frecuencia cardíaca y los ojos, dice que los veterinarios querrán hacer análisis de sangre para detectar anomalías en las células sanguíneas, la función hepática y los niveles de electrolitos para tratar de llegar al fondo de la causa.
Dependiendo de la situación, es posible que tu veterinario también quiera realizar una resonancia magnética o una tomografía computarizada, sobre todo si se sospecha de un tumor o bulto cerebral.
¿Cómo se trata el acto de presionar la cabeza en los perros?
“El tratamiento del acto de presionar la cabeza está exclusivamente ligado a la causa subyacente”, dice la Dra. Greenstein.
Como ya hemos comentado, las causas de este comportamiento pueden ser muy variadas. El tratamiento de un veneno ingerido por accidente es muy distinto del de un tumor cerebral. Dependiendo de la causa, los tratamientos pueden ir desde líquidos y antibióticos hasta quimioterapia y radioterapia.
Conclusiones
Como hemos visto, el acto de presionar la cabeza es un problema grave que requiere atención veterinaria inmediata, ya que suele ser indicio de un problema cerebral.
Debido al amplio abanico de posibles causas subyacentes de este comportamiento, es fundamental llevar cuanto antes al perro al veterinario para obtener un diagnóstico correcto y un tratamiento adecuado.
“Lo mejor es detectar cualquier enfermedad en las fases más tempranas posibles”, dice la Dra. Greenstein, “porque cuanto antes se detecten determinadas afecciones, más fáciles serán de tratar y quizá podremos medicar para intentar ralentizar la progresión de afecciones que podrían estar agravándose”.