El gato de la savannah es un animal intrigante y misterioso gracias a su mezcla única de aspecto exótico y temperamento juguetón.
¿Pero cuánto sabes realmente sobre estos gatos tan poco comunes? ¿Son amistosos u hostiles? ¿Les gusta la gente?
Aquí hemos recopilado toda la información que necesitas. ¡Vamos a conocer a esta criatura enigmática!
1. El gato de la savannah proviene de un orgulloso linaje
Los rasgos únicos del gato de la raza savannah se lograron al cruzar un serval africano salvaje con un gato siamés doméstico. Este cruce es responsable del aspecto exótico de gato salvaje de esta raza y de su temperamento doméstico.
La primera cría nacida de este cruce recibió el nombre de Savannah, que se convertiría en el nombre de la raza. En realidad, el origen del gato de la savannah es bastante reciente: fue reconocido oficialmente por la Asociación Internacional de Gatos en 2001.
2. El gato de la savannah tiene una apariencia llamativa
El aspecto físico del gato de la savannah, un animal criado para tener una apariencia majestuosa y digna, es parecido al del guepardo salvaje. Su cuerpo y sus extremidades son alargados y presentan hermosas motas oscuras por todo su pelaje dorado. Sus orejas enormes y erguidas los hacen reconocibles de inmediato.
Desde el año 2006, el gato de la savannah ostenta el récord Guinness del gato doméstico más alto del mundo.
3. El gato de la savannah tiene un temperamento único
Se dice que el carácter del gato de la savannah es muy parecido al de los perros. Disfrutan de la compañía de sus humanos y tienen la costumbre de seguir a sus dueños por casa.
También son extremadamente leales y tienen un fuerte apego por sus dueños. Esta lealtad protectora puede manifestarse en forma de desconfianza ante los extraños, por lo que es recomendable que el gato de la savannah se socialice con personas y otros animales desde que es pequeño.
4. Son gatos con una gran energía
El gato de la raza savannah es extremadamente enérgico y atlético. A diferencia de la mayoría de los felinos, que prefieren pasarse el día entero durmiendo, los savannah requieren mucho ejercicio e interacciones. ¡Quieren jugar contigo! Debes tenerlo en cuenta, ya que no es ideal para una persona que está buscando un gato faldero y perezoso. Pero si quieres tener un compañero juguetón y eres un auténtico amante felino, un gato de la savannah podría ser perfecto para ti.
5. ¡Les gusta el agua!
Es difícil imaginarse a un gato deseoso por darse un chapuzón, pero los savannah no tienen miedo del agua y, de hecho, disfrutan nadando. Algunos savannah incluso querrán unirse a sus dueños en la ducha.
6. El gato de la savannah es un saltador atlético
No te sorprendas si ves a un gato de la savannah saltar sobre una nevera o un mueble alto. Los savannah pueden saltar hasta una altura de casi dos metros y medio, por lo que es importante no dejarlos en el exterior sin supervisión si pueden escaparse.
Estos gatos son muy aventureros y les encanta explorar y escalar. También necesitan más espacio vertical que los felinos domésticos comunes.
7. Son animales muy inteligentes e inquisitivos
Con un adiestramiento adecuado, estos gatos curiosos pueden aprender órdenes simples. Por ejemplo, puedes enseñarle a tu gato de la savannah a recuperar juguetes. Además, les encantan los juegos y los rompecabezas con comida.
Los savannah incluso pueden descubrir cómo abrir puertas y armarios. Explorar es parte de su naturaleza, por lo que harán cosas con las que tal vez no contabas.
8. Les gusta que los paseen con correa
¿Alguna vez has querido tener un gato con el que poder salir a dar un paseo por la calle? Normalmente a los gatos no les gusta pasear con correa, pero los gatos de la savannah son especiales y pueden ser adiestrados para pasear con correa. Esto requiere práctica y paciencia, pero el placer de pasear a tu gato por el parque compensa todo el esfuerzo.
No obstante, ten esto en cuenta: aunque el temperamento del gato de la savannah puede ser parecido al de un perro, sigue siendo un felino. Su cuello no soporta el tipo de presión que usarías para pasear a un perro con correa. En lugar de los collares habituales para perros, puedes usar una chaqueta o un arnés especiales diseñados para las características del gato de la savannah.
9. Los gatos de la savannah no son para todos los bolsillos
Estos gatos de aspecto impresionante no son precisamente baratos. Su precio se encuentra entre los 2.800 € y 7.000 € en función de varios factores, que incluyen:
- Número filial: este número hace referencia a la generación de un gato de la savannah, es decir, a qué distancia está de su ancestro serval original. Los savannah F1 tienen un porcentaje mayor de ADN serval, por lo que su precio es mayor.
- Sexo: los machos de las generaciones F1, F2 y F3 suelen ser estériles, por lo que las savannah hembras son más valiosas y costosas.
- Conformidad con los estándares de la raza: las crías de un gato de exposición alcanzarán un precio más alto que las de un gato de compañía ordinario.
Aunque no son para todo el mundo, estos majestuosos gatos pueden ser unos compañeros encantadores para la persona adecuada. Si te atreves a aceptar el desafío de tener una mascota activa y en ocasiones traviesa, un gato de la savannah podría ser una buena opción.
Puede que sean algo problemáticos, pero cualquier dueño de un gato de la savannah estará de acuerdo: a cambio recibirás abundante amor y cariño.
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