8 peligros del invierno para los perros (y cómo evitarlos)
Parece que era ayer cuando hacías polos helados para tu perro o le ponías cubitos de hielo en un bol. Pero ya ha llegado el invierno y es hora de hablar de la seguridad de tu perro de Rover en la época más fría del año.
Cómo evitar las enfermedades relacionadas con el frío
Peligro: hipotermia. Cuando la temperatura de un perro baja demasiado, empieza a temblar, se muestra apático y, si no se le trata, desarrolla síntomas más severos (fuente: VetPraxis).
Cómo evitarlo:
- Haciendo paseos más cortos en los días más fríos.
- Poniendo una toalla en la secadora a baja temperatura antes de salir y envolviendo al perro en ella al llegar a casa.
- También puedes envolver la toalla en una bolsa de agua caliente y calentar al perro de esta forma, pero asegúrate de no quemarle la piel.
- Llevando jerséis, abrigos y botines para perros estarán calentitos y cómodos durante los paseos de invierno. Además, ¡los perros que van vestidos son supermonos!
Peligro: sal en la acera. Echar sal en las aceras evita los resbalones, pero también puede dañar las delicadas almohadillas de las patas de tu perro. Y no solo eso: muchas de las soluciones anticongelantes más usadas también pueden perjudicar a los perros en caso de ingesta.
Cómo evitarlo: Te recomendamos secar las patas de tu perro con una toalla tras los paseos y preguntar a su dueño (en caso de que seas cuidador de Rover) si usa jersey o botines cuando hace frío. Si quieres más consejos sobre cómo mantener sanas las patas y la piel de tu perro en invierno, echa un vistazo a este artículo sobre su cuidado.
Peligro: caen gotas de anticongelante del radiador del coche en la acera o en la carretera. Hay personas que incluso lo echan en el váter para preparar las cañerías para el invierno. Por desgracia, sabemos que los animales lo lamen del suelo, ya que les atrae el sabor dulce de su ingrediente principal, el glicol de etileno (fuente: Affinity Petcare). Los síntomas de la ingestión de anticongelante incluyen:
- vómitos
- jadeos
- sed excesiva
- estado de embriaguez (fuente: Red Canina).
Si un perro bajo tu cuidado lame ni que sea un poco de anticongelante, llévalo al veterinario rápidamente, y llámanos a nosotros y a su dueño en la mayor brevedad posible.
Cómo evitarlo: No dejes que el perro se pasee por el garaje o el camino de entrada de la casa, donde se suelen encontrar los restos de anticongelante. Asegúrate de guardar el anticongelante a un nivel al que ni el perro más curioso pueda llegar.
Peligro: el dueño del perro o tú os quedáis tirados por el temporal.
Cómo evitarlo: Ten un plan alternativo para los días de frío por si el dueño del perro o tú no llegáis. Si ambos tenéis ya buena sintonía en el primer encuentro y decidís seguir adelante (o aceptas otra reserva del mismo cliente), haced un plan contra el frío inmediatamente que contemple qué hacer si uno o otro no puede llegar a tiempo.
Asegúrate de que no toman comida durante las fiestas
Peligro: comida tóxica o de riesgo
En esta época del año, aunque nos encanta, hay que poner especial atención a que tu perro no coma sobras. Sabemos que puede resultar duro negarle algo a esos ojitos que pone tu perro, pero la comida para humanos es tóxica y peligrosa para los perros, sobre todo:
- cebolla
- ajo
- uvas
- chocolate
- alcohol
- cafeína
- alimentos con huesos
- frutos secos
- masa de levadura
Cómo evitarlo: Si puedes, coloca el cubo de la basura debajo del fregadero y no dejes que los invitados den de comer a tu perro de Rover. No dejes platos desatendidos, ni tan solo para darte un momento la vuelta mientras pones los platos en el lavavajillas.
Toma precauciones adicionales
El invierno es una época de mucho trabajo para los cuidadores de Rover, aún más durante las fiestas. En este artículo te contamos cómo hacerlo para que los humanos y los perros puedan pasarlo en grande.