- No sustituye a consejo veterinario profesional.
Cuando piensas en una mascota pidiendo comida, el primer animal que te viene a la mente es probablemente un perro. Pero los gatos también pueden estar obsesionados con la comida. (Existe una razón por la que terminan en las encimeras de tantas personas). Por desgracia, un gato que siempre tiene hambre puede ser un signo de problemas de salud graves.
5 razones por las que tu gato siempre tiene hambre
Bien, ya hemos establecido que tu gato parece pensar que es la hora de comer todo el tiempo. ¿Por qué?
Resulta que algunas de las razones pueden ser psicológicas (¡cualquier dueño de gato te dirá lo grandes que pueden ser las personalidades de los felinos!), pero otras pueden ser signos reales de enfermedad.
Una gran señal de alerta: si tu gato ha pasado de comer de manera bastante normal a estar hambriento todo el tiempo, puede haber algún problema. Consulta con tu veterinario cuando notes cambios significativos en los hábitos alimenticios de tu gato.
1. No son fanáticos de los horarios de alimentación establecidos por humanos
Según los expertos de Vet Help Direct, los gatos salvajes pasan de 12 a 24 horas buscando comida y, a menudo, están acostumbrados a comer comidas pequeñas con regularidad, en lugar de seguir un horario de alimentación establecido por humanos. Si bien muchos gatos se acostumbran a comer comidas más abundantes un par de veces al día, algunos no lo hacen. Empiezan a pedir regularmente incluso cuando no tienen hambre, especialmente si les das premios.
2. Curiosidad
Bonnie Markoff, DVM, ABVP, veterinaria de Animal Care Clinic en San Luis Obispo, CA, escribe que a veces los gatos piden comida, en concreto comida de personas, porque tienen curiosidad.
Pero los dueños deben tener cuidado y mantener a los gatitos curiosos alejados de esta comida, lo que requerirá tanto mantenerlos alejados de las encimeras como darles algo más para entretenerse.
Los juguetes para gatos o las golosinas de hierba gatera pueden ser útiles. También puede hacerlo el envejecimiento, ya que los gatitos más jóvenes tienden a ser más curiosos que los mayores.
3. Diabetes felina
La diabetes mellitus es relativamente común (quizás hasta el 2 % de los gatos la desarrollan) y provoca una escasez de insulina o una respuesta deficiente a la insulina producida, dependiendo de si es del tipo I o del tipo II.
La diabetes dificulta que el cuerpo de tu gato procese la glucosa para obtener energía, lo que conduce a un exceso de glucosa (azúcar) en la sangre, según PetMD. Un hambre exagerado y repentino es uno de los síntomas comunes de la diabetes.
Otros síntomas incluyen mucha sed y orinar con más frecuencia. La diabetes no tratada puede convertirse rápidamente en una emergencia pero si se trata, los dueños pueden ver a sus mascotas vivir perfectamente hasta la vejez.
4. Problemas de tiroides
El hipertiroidismo es otra enfermedad común en los gatos. Según la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Cornell, la mayoría de las veces aparece a causa de un tumor benigno en una de las glándulas tiroideas, lo que conduce a un aumento en la producción de hormona tiroidea.
El aumento del apetito, especialmente cuando se combina con la pérdida de peso, es uno de los signos más comunes. Otros signos incluyen pérdida de peso, aumento de la sed y la micción, e incluso vómitos y diarrea. Es importante tratarlo ya que las hormonas tiroideas afectan a todo el cuerpo del gato, especialmente el corazón y los riñones.
5. Problemas digestivos, incluido cáncer
Si bien la enfermedad del intestino irritable generalmente produce pérdida del apetito, si tu gato no está absorbiendo suficientes nutrientes podría terminar con más hambre, según Vet Help Direct. Los tumores digestivos pueden provocar un problema similar. Por eso, si tu gatito pasa de tener un apetito regular a morirse de hambre repentinamente todo el tiempo, vale la pena consultar con un veterinario.
Cómo es el apetito normal de los gatos
Los gatos son más felices cuando divides las comidas en al menos dos veces al día, con aproximadamente 12 horas de diferencia, según los hospitales VCA. Pero con mayor frecuencia también funciona: piensa en el horario de desayuno, comida, merienda y cena que probablemente mantienes. La rutina es clave, y tú estás a cargo de la rutina.
La edad de tu gato marca la diferencia en la cantidad de comida que necesitarás para alimentarlo. Los gatitos en crecimiento pueden necesitar tres comidas al día, independientemente de su horario. Tanto la comida húmeda como la comida seca son apropiadas, solo asegúrate de que su bebedero esté lleno, especialmente cuando alimentas a tu gato con comida seca.
Si a tu gato parece gustarle demasiado su comida, puede valer la pena cambiar a una comida que sea un poco menos deliciosa para que no tenga la tentación de comer en exceso. Puede hacer que coma mas lento poniendo su comida en un juguete.
Solo asegúrate de saber cuánta comida debe recibir para no sobrealimentarlo. Y definitivamente evita la “alimentación libre o ad libitum” de tu gato, en la que colocas su comida y la dejas a su alcance en todo momento. Eso puede hacer que los gatos, e incluso los gatitos, tengan sobrepeso.
A diferencia de los perros, muchos gatos no vendrán corriendo cuando dejes su comida. Pero mientras coman lo suficiente, debería estar bien. Si tienes la suerte de tener varios gatos, un gatito ansioso y hambriento junto con otro relajado puede ser especialmente desafiante. Tendrás que experimentar, eso puede significar alimentar a los gatos en diferentes habitaciones.
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