Después de las bajas temperaturas invernales, por fin ha llegado el momento de disfrutar de un poco de sol. Aunque para muchos esto significa ir de pícnic, nadar en la piscina y disfrutar de las terrazas, a menudo olvidamos que nuestros perros son muy peludos y no pueden refrescarse con tanta facilidad como nosotros. ¿Te has preguntado alguna vez cómo refrescar a tu perro en verano? No lo pienses más y sigue nuestros consejos.
Consejos para refrescar a tu perro en verano
Cambia tu rutina
Los perros necesitan ejercicio, así que evita el calor abrasador del mediodía y pasea a tu mascota a primera hora de la mañana o a última hora del día. Tanto tú como tu perro lo agradeceréis.
Manténlo hidratado y evita la insolación canina
Lleva siempre agua contigo. Puedes utilizar una cantimplora o un recipiente de agua portátil, ¡o deja que tu perro la lleve en su propia mochila!
Como los perros no pueden sudar y solamente se refrescan mediante el jadeo, presta atención a las posibles señales de deshidratación que puede mostrar tu perro en esta época del año:
- Boca seca
- Ojos hundidos
- Letargo o cansancio
- Pérdida de apetito
- Depresión
En el caso de que veas alguno de estos síntomas, llévalo inmediatamente al veterinario. Recuerda siempre darle agua limpia. Si ves que no bebe líquido, prueba de añadir al recipiente un poco de zumo de zanahoria, caldo de pollo ¡o trozos de su fruta favorita! Incluso puedes añadir cubos de hielo para que se divierta intentando comerlos.
Además de beber mucho líquido, ten mucho cuidado con la insolación. Para evitarla sigue el primer consejo que te hemos dado y los que verás a continuación, y haz paseos cortos para evitar que tu peludo sufra demasiado el calor.
Estas son las señales de insolación más comunes:
- Temperaturas elevadas (38,6 ºC es su temperatura normal)
- Respiración rápida y jadeos
- Salivación en exceso y saliva espesa
- Fatiga y depresión
- Temblores musculares
- Tambaleo
Si has detectado alguno de estos síntomas, haz que tu perro entre en casa rápidamente y contacta con tu veterinario. Envuelve a tu perrete en toallas húmedas y frías, especialmente cubriendo la zona de las axilas, ingles y vientre de tu perro. También puedes usar un ventilador durante el proceso de enfriamiento.
Vigila la temperatura corporal de tu perro cada cinco minutos y finaliza el tratamiento de enfriamiento cuando la temperatura haya disminuido a 39,4 ºC. Evita enfriarlo demasiado rápido para evitar el shock. Ponle agua fría pero no lo fuerces a beber. Es posible que tu veterinario le administre líquidos por vía intravenosa si se encuentra deshidratado.
Evita superficies calientes
Durante una paseo, ten mucho cuidado con el pavimento o el asfalto caliente, ya que las patas de nuestros mejores amigos pueden quemarse. Esto es muy doloroso para nuestros perretes. Para descubrir cómo evitar las quemaduras en las patas de tu perro puedes leer este artículo.
Busca un rincón en la sombra
Ya sea en el jardín o en el parque, busca un rinconcito a la sombra para que tu perro se tumbe. En caso de que no encuentres ningún sitio, puedes hacer tu propia sombra colocando una lona o tela encima de tu perrete y sosteniéndola con ayuda de algunos árboles. Si tienes una piscina inflable o una manguera de jardín, deja que tu perro se divierta en el agua. Además de refrescar su pelo, acuérdate de mojarle también las patas, ya que se enfrían de abajo hacia arriba.
Usa una toalla húmeda para refrescar a tu perro en verano
Una buena idea para refrescar a tu peludo es colocar una toalla húmeda en el suelo para que tu perro se siente o acueste sobre ella. Es útil también llevarla durante un paseo para que tu perrete descanse un rato en ella antes de volver a casa.
Nunca dejes a tu perro encerrado en el coche
Quizá pienses que es algo evidente, pero muchas personas desconocen que si dejan a su perro durante más de 6 minutos en un coche, puede morir. Los coches, los invernaderos y las caravanas retienen más calor que cualquier otro espacio abierto, incluso a la sombra. Nunca deberías dejar a tu perro en un coche cuando hace calor, ni siquiera con la ventana abierta, ya que puede alterarse debido a los peatones o sufrir un ataque de claustrofobia.
De acuerdo con la Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (RSPCA), cuando hace 22°C afuera, al cabo de una hora es posible alcanzar los 47 ºC dentro de un coche. Estas temperaturas pueden ser peligrosas para los humanos por largos períodos de tiempo, pero aún más dañinas para los perretes. Si ves a un perro angustiado dentro de un coche debido a las altas temperaturas, llama rápidamente al número de emergencias 112.
Prepara helados perrunos
Esta es la mejor época del año para elaborar deliciosos helados para perros. Son perfectos para mantener hidratado a tu perro mientras él disfruta lamiendo fruta o verdura helada. Puedes encontrar algunas recetas aquí.
Refresca el ambiente en casa
Bajar la temperatura ambiental es fundamental para que tu perro esté a gusto en casa durante los meses de verano. Igual que las personas, los perros también se benefician de ventiladores y sistemas de aire acondicionado que refresquen la casa. Con todo, es recomendable evitar las corrientes de aire, que podrían desencadenarle problemas de salud.
Adapta su dieta
Es importante que tu perro beba más agua en verano, así que asegúrate de que tiene varios bebederos en casa y anímalo a beber activamente. Aparte, haciendo pequeñas modificaciones en su dieta vas a favorecer que se mantenga hidratado cuando el calor aprieta: por ejemplo, puedes sustituir el pienso por comida húmeda, que contiene un mayor porcentaje de líquido. Aun así, si observas que tu perro come menos de lo normal no te alarmes, ya que su apetito disminuye con el calor.
Las razas que mejor se adaptan al calor
Normalmente los perros con el pelo corto y el hocico largo se adaptan mejor al calor; por ejemplo, los dóberman, los pointer y los dogos alemanes. En cambio, los perros con el pelaje grueso y el hocico pequeño o corto no se sienten muy cómodos en altas temperaturas.
No obstante, existen otras razas que se adaptan mejor al calor, ya que nacieron en un ambiente caluroso. Es el caso de perros como el basenji o el podenco faraónico. Este tipo de perros se caracteriza por tener narices alargadas que enfrían el aire, además sus grandes pulmones y su corazón distribuyen el oxígeno a través de sus cuerpos. Algunos ejemplos son los saluki, los galgos y los whippet.
Razas y condiciones sensibles al clima
Mientras que la mayoría de los perros pueden tolerar los meses calurosos de verano con una hidratación y ambiente adecuados, a algunos perretes les costará mucho más.
A todos los perros de nariz chata o braquicefálicos les cuesta más regular su temperatura debido a que tienen conductos nasales más cortos. Algunos ejemplos son el bulldog, el carlino y el boston terrier, razas muy sensibles al calor.
Otros perros que necesitan una atención especial durante la oleada de calor son las razas gigantes, así como también los perros ancianos, los obesos y los diabéticos.
¿Es conveniente cortarle el pelo a tu perro?
Si tu perro tiene mucho pelo y además es grueso, probablemente te tiente la idea de raparlo por completo. Antes de que te inspires y te pongas manos a la obra, debes saber que esta aparente solución puede generar otro tipo de problemas, como una repentina falta de aislamiento y una menor protección solar.
Además, debido a que el pelo de protección más largo tiene un ciclo de crecimiento diferente al pelo de aislamiento interno, a algunos perros les puede llevar años recuperar su apariencia natural. Si quieres más información sobre el pelaje perruno, puedes leer nuestro artículo “Cómo manejar la muda de pelo de los perros”.