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Ninguna foto es más chula que la de tu perro posando frente al árbol de Navidad. Pero los perros y los arboles de Navidad no son siempre la mejor combinación. Los arboles decorados con adornos fáciles de romper y luces eléctricas pueden ser peligrosos para los perros y los perros curiosos pueden ser peligrosos para los arboles de Navidad.
Pero no te preocupes: ¡puedes tener un árbol de Navidad de todas formas! Solo debes tomar ciertas precauciones. Sigue leyendo para descubrir cómo hacer para que tu peque esté seguro cerca de tu árbol navideño (y viceversa).
1. Encuentra formas de evitar que tu árbol se caiga
Cuando ves que los arboles navideños se caen en la televisión puede hacerte gracia, pero no es el caso si uno se cae en tu salón. Invierte suficiente dinero en un pie de calidad para que sostenga tu árbol de forma segura. Para prevenir posibles heridas en perros curiosos, coloca el árbol de Navidad en una esquina y ánclalo de forma segura al techo o a la pared.
Para anclar tu árbol, enrolla un hilo de pescar alrededor del tronco y átalo a un ancla. Tu ancla puede ser un perno ubicado en la pared detrás del árbol. También puedes atar el hilo alrededor de la parte superior del árbol y atarlo a un tornillo en el techo. Esto evitará que el árbol se caiga en caso de que un perrito inquieto decida darle un empujón.
También puedes crear una «alarma» que te sirva como alerta si tu árbol está en peligro. Simplemente coloca un papel de aluminio o una lata llena de frijoles en las ramas inferiores del árbol. Si tu peque comienza a husmear dentro del árbol, lo escucharás a tiempo para poder intervenir.
2. Comienza con un árbol sin adorno
Antes de decorar el árbol, déjalo en tu sala por unos días. Esto ayudará a que tu peque se acostumbre a que haya un árbol en la casa, y será menos probable que intente derrumbarlo cuando hayas incorporado las bolas de Navidad y las luces.
Después de unos días con el árbol sin decoración en la sala, ¡es muy probable que tu perro pierda el interés por completo!
3. Ten cuidado con el cable eléctrico de luces
Las luces brillantes son difíciles de resistir, pero pueden ser peligrosas para tu perro. No solo puede tu peque atorarse en los cables, sino que además hay un riesgo de que se electrocute en caso de que comience a mordisquear el cable. Si quieres iluminar tu árbol de Navidad, deja las ramas inferiores del árbol vacías.
También deberás asegurar los cables que conducen hacia el árbol. Puedes esconder el cable con el paquete decorativo inferior del árbol o usar clips de cable adhesivos para que el cable se mantenga alejado del suelo y fuera de alcance.
4. Pon los adornos más frágiles en ramas más altas
Un perro grande y feliz con una cola movediza puede ser letal para las decoraciones delicadas de Navidad. Cuando se quiebran adornos, tu perro sufre el riesgo de asfixie o de lastimaduras en las patas y en la boca.
Para mantener las reliquias de tu familia seguras y proteger a tu perro del vidrio roto, coloca las decoraciones frágiles en las ramas más altas del árbol para que tu peque no pueda alcanzarlas. Otra opción es cambiarlas por adornos de plástico. Dependiendo de cuán revoltoso y curioso sea tu perro, es posible que quieras dejar un tercio inferior del árbol sin decorar.
5. No adornes con comida el árbol
Guirnaldas de palomitas de maíz, adornos de chocolate y bastones de caramelo, ¡ay dios mío! Las decoraciones con dulces son muy bonitas pero definitivamente no son para los perros. Además, nunca está demás recordar que el chocolate es muy dañino para los perros. Durante las festividades es importante mantener los dulces fuera del alcance de tu mejor amigo de cuatro patas, lo que significa que debes alejarlos del árbol.
6. Mantén las plantas tóxicas fuera del alcance de tu perro
Algunas plantas comunes que uno puede encontrar en una casa son el acebo, el muérdago y la flor de pascua, sin embargo son potencialmente tóxicas para los perros. Si quieres decorar con esas plantas, manténlas bien alejadas de tus mascotas. Te recomendamos que busques otras plantas alternativas aptas para perros o compres plantas artificiales, ya que se verán igual de bonitas y son mucho más seguras para los perros.
Si bien las agujas de pino no son particularmente tóxicas, son pequeñas y afiladas, y pueden causar lesiones en la boca y los intestinos de tu perro. Si tienes un árbol de Navidad real, asegúrate de aspirar las agujas que caen al suelo todos los días.
7. ¿Velas? Manténlas en alto y fuera del árbol
Las velas hacen que la época de Navidad sea acogedora y brillante, pero las llamas y los perros no son la mejor combinación (ni tampoco las llamas y los arboles de Navidad). Pero los destellos de las velas son difíciles de resistir, así que si estás decorando con velas, colócalas en estantes altos fuera del alcance de tu perro. Para lograr ese efecto brillante en tu árbol de Navidad, prueba velas LED.
8. Guarda los regalos hasta la mañana de Navidad
A veces el árbol no es lo más atractivo para los perros, sino lo que está debajo del árbol. Para mantener los regalos de Navidad a salvo, y proteger a tu peque de ingerir algo que no debería, no dejes los regalos bajo el árbol. Espera a que Papá Noel llegue en noche buena a dejar los regalos y despierta para disfrutar de regalos que no hayan sido babeados por tu mejor amigo peludo.
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En resumen, la época navideña es muy especial y si sigues estos consejos, ¡podrás asegurarte de que tanto tú como tu mejor amigo, paséis una Navidad feliz y luminosa! En el caso de que te vayas de viaje en Navidad y no puedas llevar contigo a tu pequeño peludo, Rover.com cuenta con muchos cuidadores que ofrecen alojamiento de perros para que puedas disfrutar de tus vacaciones sin preocupaciones!
