Hay dos perros que suscitan una verdadera lealtad en aquellas personas que disfrutan de su compañía: los caniches y los schnauzer. Por ello, estas dos razas fueron cruzadas de forma ingeniosa para crear una mezcla con una legión de apasionados seguidores: el schnoodle.
Según los criadores, el perro schnoodle es tan protector como un schnauzer, tan inteligente como un caniche y tiene un aspecto y una personalidad que harán que desees que esta mascota forme parte de tu familia para siempre.
Aquí te presentamos algunos datos que las personas que aman a los enérgicos y afectuosos schnoodle saben mejor que nadie.
1. Mantienen un tamaño pequeño
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Aunque se puede obtener un schnoodle gigante que pese hasta casi 40 kg (cruzando un caniche estándar con un schnauzer gigante), el peso de la mayoría de los schnoodle oscila entre los 4,5 y los 9 kg. Por tanto, si eres el tipo de persona a quien le gusta llevar a su perro al trabajo o simplemente sacarlo a pasear por la ciudad, estos perros son suficientemente pequeños para viajar a prácticamente cualquier sitio.
2. Son increíblemente cariñosos
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Si están bien socializados desde que son cachorros, los schnoodle no tendrán ningún problema en hacer amigos. Les encantan los arrumacos cariñosos, lamer caras y robar más espacio en la cama del que parece físicamente posible. Son puro amor, así es el carácter del schnoodle.
3. Los schnoodle quieren tener amigos, está claro
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La personalidad del schnoodle es especialmente amistosa. Les encanta relacionarse con sus amigos humanos o perrunos o con quien esté dispuesto a proporcionarles atención. Puede que les lleve un poco de tiempo tomar confianza con algunas personas, ya que el schnauzer es conocido por ser un perro guardián, pero en cuanto se den cuenta de que no eres una amenaza, no dejarán que te alejes de ellos.
4. Les gusta el adiestramiento
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El adiestramiento del schnoodle puede ser una actividad muy gratificante. Al ser una mezcla de caniche, se trata de mascotas increíblemente inteligentes, por lo que les gusta aprender casi cualquier cosa, siempre y cuando se diviertan y puedan liberar energía. Los schnoodle son realmente buenos en los trucos atléticos, como saltar a través de aros, así que no dudes en poner a prueba su agilidad. Intenta crear una carrera de obstáculos sencilla al aire libre y recorrerla con tu perro schnoodle. ¡Le encantará hacer una actividad tan divertida y entretenida!
5. Es poco probable que te haga estornudar, pero deberías encontrar una buena peluquería
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Los schnoodle tienden a heredar de los caniches un pelaje que no muda, por lo que en ocasiones se consideran perros “hipoalergénicos”. Aunque ningún perro es realmente hipoalergénico (dado que el alérgeno también está en su piel y en las glándulas salivales, y estas están presentes en todos los perros), el pelaje que no muda puede ayudar a personas con alergias leves. Además, sin duda, tu aspiradora lo agradecerá.
A pesar de que no mudan mucho, una de las características del schnoodle es que su pelo es largo y crece rápido. Por tanto, no es extraño que el personal de una peluquería conozca en poco tiempo a un schnoodle y a su dueño por el nombre. Algunos dueños aprenden a cortar los rizos de su mascota por su cuenta, y lo bueno de esto es que tu schnoodle no se quejará si su aspecto es algo ridículo mientras estás aprendiendo. Por lo menos deberías mantener recortado el pelo alrededor de sus ojos: así sabrás cuándo te está suplicando que le des una chuche.
6. … y acostumbrarte a cepillarle el pelo
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Para mantener sano el pelaje de un schnoodle, es necesario un cepillado semanal. En particular, porque va a pasar mucho tiempo jugando al aire libre, ¿verdad? Si no los cepillas a menudo, toda la suciedad y la hierba en la que se revuelcan alegremente se enredará y enmarañará en su pelaje rizado, lo que sería una verdadera lástima porque…
7. ¡Su pelaje es tan suave!
Fuente: WIKIMEDIA COMMONS
No importa si es de color melocotón, blanco, plateado o marrón: es muy agradable acariciar a este perro porque su pelaje parece auténtica seda. Los amantes de la raza de perro schnoodle no se avergüenzan en absoluto de hundir su cara en el pelaje esponjoso y mullido de su perro.
8. Puedes dejarte llevar por tu creatividad al peinarlo
Foto de Jerry Davila/Flickr
Una de las razones por las que es tan divertido tener una mascota de pelo largo como un schnoodle es que puedes hacerle todo tipo de peinados locos. ¿Una cresta? Por supuesto. ¿Corte cuadrado? No lo dudes. ¿Corte de cachorro? Adorable.
9. Los schnoodle tienen energía de sobra
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Los schnoodle necesitan correr, jugar, saltar y perseguir. Esto no significa que tengas que sacarlos a correr a diario, pero no se contentarán con ser un perro faldero todo el día. A los schnoodle les encanta correr de un lado para otro, por lo que será necesario que tengáis un parque de perros cerca de casa o establezcáis una rutina de paseo que permita a tu perro liberar toda su energía. También puedes llevarlo a hacer senderismo: se lo pasará en grande. Si no haces nada de esto, es posible que te encuentres con algunos de tus objetos más queridos mordisqueados de forma irreparable.
10. Les encanta corretear en círculos
En ocasiones, los schnoodle se emocionan mucho y comienzan a correr rápidamente en círculos. Su parte trasera se mantiene relativamente cerca del suelo y llevan la pelvis hacia adentro mientras se mueven a toda velocidad. No son gráciles como una gacela, pero sí bastante adorables. Por cierto, los schnoodle pueden corretear con tanta intensidad que algunos dueños los llaman “Schnoodle 500”.
Si hablas con cualquier persona que tenga este perro mezcla de caniche y schnauzer, seguramente podrá contarte historias sobre cómo ha cambiado su vida a mejor. Al tratarse de una raza tan suave y adorable, ¿cómo no iba a ser así?
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